

Gran cantidad de cajas, cartones, enseres en desuso, mesas apolilladas, sacos de polietileno llenos de insectos y demás objetos inservibles que servían para que aniden los roedores, fueron retirados de los pasadizos del mercado Central por personal de Comercialización de la Municipalidad Provincial de Talara, como parte de las labores de reordenamiento que se continúan para evitar el contagio o la propagación del COVID-19.
Con apoyo del personal de Fiscalización y Serenazgo, la municipalidad obligó a los comerciantes a respetar los espacios públicos que son para todos los talareños y advirtió que de continuar infringiendo las normas y medidas de seguridad, se harán acreedores a ejemplares sanciones que incluso puede terminar en la reversión de los puestos.
Lamentablemente no faltó algún comerciante que pretendió impedir la labor de los municipales, bajo el pretexto de que lleva trabajando en el mismo lugar por más de 20 años; incluso, uno de ellos intentó llamar a un abogado con la intención de evitar que los ediles cumplan con su función.